¡Dejemos de llamarlas Habilidades “Blandas”!

Estoy convencido de que las mal llamadas habilidades blandas son los superpoderes que necesitas no solo para sobrevivir, sino para ser excelente en el mundo de hoy.

Déjame tratar de explicarlo con una historia real:

No recuerdo bien, pero sería algo así como el cuarto grado de la primaria y convivíamos en el aula una treintena de pequeñas bestias de entre 9 y 10 años, casi todos cortados por la misma tijera: Gritones, desordenados, desaseados, amantes de las actividades al aire libre y -obvio- atormentados por tener que estar encerrados 6 horas al día.

Digo casi todos y no todos, porque dos de ellos se distinguían claramente de entre la multitud: Uno, (nombres ficticios para proteger inocentes) al que llamaremos Mario y al otro, Raúl.

Pues bien, Mario era inteligentísimo, no solamente hacía todas las tareas y trabajos, sacaba sobresaliente en todos los exámenes, entendía las lecciones más rápido y mejor que todos los demás, calculaba cifras astronómicas mentalmente y en pocos segundos; era pues, el sueño de cualquier maestro.

Por su parte, Raúl era para la maestra una de esas pesadillas que se consiguen por cenar después de las 10 de la noche: ¡Una desgracia en todo su esplendor!: Era ocioso, de lento entender, incapaz de interesarse por cualquier cosa que viniera en por escrito, incompetente para cumplir con las tareas, negado para las tablas de multiplicar.

La maestra, con la cabeza llena de modelos mentales antiguos (tanto como ella misma) se llenaba la boca elogiando a Mario y prediciendo lo bien que le iba a ir en la vida, mientras le auguraba a Raúl que lo mejor que podría conseguir era algún equivalente contemporáneo a remar en las galeras de una embarcación romana del siglo I.

Pasaron los años y podemos encontrar a Mario como profesor de Ciencias Informáticas en una Universidad (lo que claramente, va con su perfil) mientras que Raúl, a quien nadie le hubiera apostado ni un céntimo, es una persona muy bien ubicada también: Es un empresario exitoso, puso un establecimiento comercial, lo hizo crecer, es representante de marcas de alta gama; tiene una hermosa familia, una linda casa de playa y otra en el campo, caballos de paso, una embarcación de placer y la pasa súper bien.

¿Qué es lo que falló? ¿Por qué las predicciones no funcionaron?

Según parece, ni la maestra, ni ninguno de nosotros tomamos en cuenta unas habilidades que Raúl tenía y que Mario no.

Mientras Mario, con toda su capacidad técnica era un fuera de serie, dotado con talentos “hard” muy orientados a la tarea; Raúl tenía ese set de habilidades que le permitían caer bien fuera al lugar que fuera: Era conversador, gracioso, servicial, entretenido, es decir, un tigre para establecer relaciones con sus semejantes.

¿Ya, pero hasta aquí, cuál es la moraleja?

Que tener las habilidades que tiene Raúl (Buena comunicación, sentido del humor, actitud de servicio, capacidad de escucha) entre otras varias, sirven un montón a la hora de sobrevivir y destacar en este mundo que nos ha tocado vivir.

Los que no trajimos de fábrica con el plugin de dichas habilidades y talentos claramente podemos (Y me incluyo, porque fue mi caso) aprender a tenerlas y a utilizarlas. Esa es la buena noticia.

Y el momento para dedicarte a ello es ahora: Cada vez en mayor medida, estas habilidades, que yo insisto en llamar “Esenciales” o “Soft Skills” en lugar de “Blandas” son solicitadas para seleccionar, promover y desarrollar personal en las empresas, y son ultra requeridas por muchos emprendedores en el camino de posicionar su compañía con clientes, proveedores, aliados estratégicos y su propio personal a cargo.

La gente- ya es hora de que lo tengamos en cuenta- no busca solo que las tareas se cumplan en tiempo y forma; las personas buscan, a veces por encima a de todo, sentirse respetadas, entendidas, valoradas, lideradas, integradas.

Recuerda a Raúl: Sus capacidades de interrelación, de tolerancia a la frustración, de empatía, de comunicación y persuasión, lo ayudaron mucho. Contigo puede suceder exactamente lo mismo, o incluso más.

Tengo un video en el cual te comento un poco más sobre la importancia de estas habilidades e incluso, te pongo casos muy puntuales en los que podrás darte cuenta de en qué situaciones de la vida cotidiana, te sirve tenerlas desarrolladas. Dale una mirada aquí.

Por ejemplo, ahora tenemos eso que muchos llaman la “Nueva Normalidad” que nos exige poder reaccionar adecuadamente a cambios muy radicales en nuestro modo de vivir y de hacer las cosas. ¿Estamos adecuadamente preparados para ello?. Algunas personas sí, otras no tanto. Estas últimas están pasándola mal por varios motivos, uno de ellos es que no tienen lo suficientemente desarrolladas las habilidades necesarias para recuperarse bien y pronto.

¡Esto es muy importante! Recuperarse bien y rápido de las adversidades, es una soft skill que nos va a hacer mucha falta aprender a dominar hoy. No sé si te contaron, pero estoy regalando un autodiagnóstico para que descubras que tan bien tienes desarrolladas algunas de las habilidades que conforman tu resiliencia. Lo encuentras aquí.

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¡Hasta la próxima!

Escrito por Francisco Grillo

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